Pazo de Rubianes, 2021

La camelia es una planta de origen oriental, que llegó a Europa de la mano de los jesuitas. De hecho su nombre proviene de un padre jesuita, Camellus. Se trata de una flor que requiere un clima húmedo, temperaturas suaves y suelos fértiles y ácidos.

En el Pazo de Rubianes, un señorío de Galicia (España) con más de 600 años de historia, se cumplen todas estas condiciones óptimas. Tanto es así que incluso se ha creado un parque botánico con más de 4.500 ejemplares de camelias. Se trata de un Jardín de Excelencia Internacional de la Camelia fruto de la pasión por la jardinería que se ha ido contagiando a lo largo de los años de padres a hijos. Pero eso no es todo, porque desde 1999 la familia Ozores de Urcola compagina esta actividad de arte floral con la recuperación de  la explotación del viñedo, la cual se había perdido desde que la filoxera acabó con la producción. Todo un trabajo que Paloma Rey Fernández-Latorre, viuda de don Gonzalo Ozores de Urcola, ha conseguido hacer realidad convirtiendo así la propiedad en todo un referente en Galicía en el ámbito botánico, arquitectónico y vitivinícola.

Su vino Pazo de Rubianes, original del corazón del Salnés (D.O. Rías Baixas), procede de unos magníficos viñedos de la variedad autóctona albariño con una inclinación y orientación privilegiadas. 25 hectáreas de cepas postfiloxéricas plantadas en suelos graníticos y rodeadas por más de 800 especies botánicas, de entre las cuales se encuentran las camelias.

Una vez la uva alcanza su momento óptimo de maduración se vendimia manualmente en cajas de 15 kg e inmediatamente se traslada a la bodega para iniciar una maceración en frío. La fermentación se realiza en depósitos de acero inoxidable a temperatura controlada y después se procede a la crianza sobre lías de 3 meses con ‘bâtonnage’ periódico.